El zoo humano (de Desmond Morris)
---Vendido---
#00488
Temática: Divulgación científica, Filosofía
ISBN: 84-01-44061-0
Editorial: Plaza & Janés. Barcelona. 1976
Colección: Rotativa
Idioma: Español
Título Original en Inglés: The human zoo
Traducción de: Adolfo Martin
Tapa: Blanda
Nro de páginas: 203
Sinopsis: Como continuación de El mono desnudo, examina el comportamiento humano en las ciudades, también desde un punto de vista etológico.
Desmond Morris analiza la sociedad que el mono desnudo ha creado y compara al hombre civilizado con su equivalente, el animal cautivo. Los animales salvajes libres no se mutilan a sí mismos, no se masturban, no atacan a su prole, no tienen úlceras de estómago, ni forman parejas homosexuales. Pero en estado de cautividad, manifiesta conductas semejantes a éstas, comunes al hombre urbano enjaulado en sus abarrotadas ciudades.
La expresión "jungla de asfalto" con que el hombre designa su rebosante medio ambiente, es, por tanto, inexacta: Resulta más adecuado describirlo como un zoo humano. ¿Convertirá el hombre su zoo humano en es espléndido parque humano o en un gigantesco manicomnio evocador de las atestadas casas de fieras del siglo pasado?
Contratapa:
#00488
Temática: Divulgación científica, Filosofía
ISBN: 84-01-44061-0
Editorial: Plaza & Janés. Barcelona. 1976
Colección: Rotativa
Idioma: Español
Título Original en Inglés: The human zoo
Traducción de: Adolfo Martin
Tapa: Blanda
Nro de páginas: 203
Sinopsis: Como continuación de El mono desnudo, examina el comportamiento humano en las ciudades, también desde un punto de vista etológico.
Desmond Morris analiza la sociedad que el mono desnudo ha creado y compara al hombre civilizado con su equivalente, el animal cautivo. Los animales salvajes libres no se mutilan a sí mismos, no se masturban, no atacan a su prole, no tienen úlceras de estómago, ni forman parejas homosexuales. Pero en estado de cautividad, manifiesta conductas semejantes a éstas, comunes al hombre urbano enjaulado en sus abarrotadas ciudades.
La expresión "jungla de asfalto" con que el hombre designa su rebosante medio ambiente, es, por tanto, inexacta: Resulta más adecuado describirlo como un zoo humano. ¿Convertirá el hombre su zoo humano en es espléndido parque humano o en un gigantesco manicomnio evocador de las atestadas casas de fieras del siglo pasado?
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